Es una chica de números. No solo por los que maneja en sus redes sociales –1,1 millones de seguidores en Instagram y 1,5 en Twitch–, sino también porque tiene la carrera de Física. De hecho, su verdadera vocación era ser piloto de aviones, pero la miopía truncó su sueño. Ahora, Gemma Gallardo (Valencia, 1995), mejor conocida como Gemita, es streamer e influencer, un mundo que hace unos pocos años le era totalmente ajeno. Tanto que, como ella misma reconoce, no sabía ni quién era El Rubius. Pero el amor cambió el rumbo de su vida. Ser la pareja de TheGrefg, uno de los creadores de contenido de habla hispana más influyentes, le dio la oportunidad de entrar por la puerta grande en las redes sociales, pero lo de mantenerse ya es cosa suya. Y, de momento, le va muy bien. Lo último ha sido prestar su voz en ‘Los tipos malos’, la nueva película de animación de DreamWorks que está ya en cines. Aunque ella, de mala, tiene más bien poco.
Debutaste en Twitch hace justo un año, que además fue uno de los directos más vistos ese día. ¿Cómo lo recuerdas?
Con mucho cariño. Fue un día muy especial. Ahora miro atrás y veo cuánto he aprendido y he mejorado como creadora de contenido. Mucha gente me ha dado un apoyo increíble desde que empecé y, a día de hoy, siguen ahí al pie del cañón. Estoy muy orgullosa de la comunidad que he creado y de lo que he crecido a nivel personal y profesional en este nuevo mundo.
La realidad es que de los 50 usuarios de Twitch más seguidos en España, solo el 6% son mujeres. ¿Aquí también existe techo de cristal?
Es verdad que la presencia femenina en lo más alto de Twitch es reducida pero, poco a poco, vamos dándonos más visibilidad. Obviamente, nos queda mucho por delante, hay muy poca presencia femenina y tenemos que luchar por hacernos nuestro hueco. Creo que se va a abrir un mundo muy nuevo para el genero femenino en un futuro. En Twitch, tú puedes hostear –enviarle gente a otro creador de contenido– y siempre intento buscar perfiles pequeños, sobre todo de chicas, para darles ese impulso. Entre todas estamos haciendo un esfuerzo para hacer piña y animar a las mujeres que quieren ser creadores de contenido a intentarlo.
Tienes la carrera de física. ¿Vocación o no sabías qué hacer cuando llegó el momento de decidir?
Mi vocación era ser piloto de aviones, pero tengo mucha miopía y por lo público, que es el ejército, no podía entrar. Cuando empecé bachillerato, es verdad que no sabía por dónde tirar pero sí sabía que tenía que ser algo relacionado con la ciencia. Siempre me han gustado mucho los números, las matemáticas y la física era lo que mejor se me daba. Aparte, siempre he tenido ese instinto de saber el porqué de las cosas, cómo funciona todo lo que nos rodea. Estuve viendo opciones y me decanté por la física porque me gustaba mucho la ciencia y por matar esa curiosidad.
¿Qué planes tenías a nivel laboral por entonces?
Al terminar la carrera, tenía dos opciones: dedicarme a la investigación, lo cual durante unos años está bien o hacer una oposición que hay aquí en España: el RFIR de radiofísicos. Al final, opté por esa porque hice las prácticas en un hospital y me gustó la variedad de funciones que tenía el radiofísico. Empecé a prepararme para ser radiofísica y trabajar en un hospital, donde haces tus 4 años de residencia y, luego, ya buscas plaza.
Caer bien en este mundillo es una suerte y ha sido tu caso, aún así, no te librarás de los haters. ¿Hay algunas críticas que te molesten un poco más?
Es verdad que la gente me ha acogido muy bien y me siento muy afortunada. Pero sí tengo mis haters. Quiero que me hagan críticas constructivas para mejorar, lo malo son las críticas que no tienen ningún fundamento, como acosar a una persona por su físico. Quizá lo que más me dicen es que todo lo que tengo es por mi pareja, The Grefg. No es algo que me moleste porque es una realidad, sería de hipócrita no reconocerlo. Antes de estar con él, no conocía nada de este mundo. No sabía ni quién era El Rubius, para que os hagáis una idea. No sabía que ser youtuber era una profesión. Obviamente, si no fuese por él no formaría parte de este mundo. Él mueve a mucha gente y me ha dado esa visibilidad y la oportunidad. Luego, hay gente que se ha querido quedar y gente que no. Lo que sí que me molesta es que, a día de hoy, la gente piense que lo que logro sigue siendo por él. En este mundillo, para mí, hay dos partes difíciles: una es hacerte un nombre, y eso me lo ha dado todo él y siempre voy a estar agradecida; y la otra es mantenerse. Eso pienso que ya es cosa mía. Lo que me fastidia es que se desprestigie lo que he hecho durante todo este año cuando estoy dando el 100%. Da igual lo que haga que nunca va a ser mérito mío. Si tengo mil o dos mil personas en mis directos es porque les gusta estar conmigo y el contenido que creo.
¿Cuál es el mayor prejuicio que crees que puede tener la gente contigo?
Me hace mucha gracia cuando la gente comenta: “Es que si no fuera por él no serías nadie”. Perdona, tengo mis estudios, ¿qué pasa? ¿Si no eres famoso no eres nadie? No tiene mucho sentido. Aparte, es como que se boicotean a ellos mismos. El mayor prejuicio es ese, que estoy ahí porque soy “la pareja de”. Pero si no trabajas día a día y fomentas tu comunidad te vas a pique.
¿Te imaginabas hace unos años doblando una película de animación?
Hace unos años no me imaginaba acabar doblando una película. Nunca se me hubiera pasado por la cabeza algo así. Me siento muy afortunada y agradecida por la oportunidad.
¿Cómo te preparaste para interpretar a Tarántula en ‘Los tipos malos’?
Lo primero que hice fue investigar el personaje para entenderla e identificarme con ella. Luego, también estuve practicando mi voz. La actriz de doblaje original tiene la voz muy grave y, al principio, me asusté pero me di cuenta de que forzándola un poco podía llegar a hacerla más grave. Incluso, se me quedaba un poco rota, lo cual me pegaba mucho por la señorita Tarántula, que tiene mucho genio.
Cada vez que un rostro popular que no es actor de doblaje pone su voz en una película saltan las críticas. ¿Lo entiendes?
Por una parte, sí. En mi caso, no me he preparado para ser actriz de doblaje pero he dado mi 100% en esta película y he estado aconsejada por profesionales. También pienso que se nos machaca mucho en ese aspecto cuando nosotros lo único que hacemos es coger la oportunidad. He aprendido muchísimo. Esta experiencia ha hecho que quiera aprender más, hacer algún curso para saber más sobre esta profesión, que es muy bonita, y creo que no está suficientemente valorada, al menos en España. Tienes que transmitir con tu voz lo que el personaje está sintiendo y viviendo. Yo, por ejemplo, forzaba mucho la garganta, me faltan técnicas de respiración, etc. Hay cosas en las que tenía carencia pero con la ayuda de profesionales hemos sacado lo mejor de mí y ha quedado un resultado, en mi opinión, muy chulo.
Hora de stremear
¿Ha cambiado mucho tu vida al dedicarte al stream?
Sí, en muchos aspectos. Mi horario es peor. Hay semanas en las que me acuesto de madrugada, duermo poco… Es algo que no me gusta porque hasta hace un año era de madrugar y a las 11 estar durmiendo. Una chica muy de día. Pero, a veces, se alargan las cosas o te quedas trabajando hasta tarde. Me cuesta mucho recuperar el buen horario y me afecta mucho al día a día. Estoy como más empanada. Aparte de eso, hago menos deporte y me arrepiento, aunque lo estoy intentando cambiar. El estilo de vida que llevo ahora creo que es peor a nivel salud pero todo es responsabilidad mía porque no me he sabido organizar bien. Últimamente, lo estoy intentando llevar más a raja tabla e intento hacer pádel, ir a gimnasio, hacer snow… Pero sí, me cuesta encontrar más ese equilibrio que tenía antes de ser streamer.
¿Echas algo de menos de tu vida de antes?
Sí. Cuando trabajaba como física, las horas que tenía que dedicarme a ello estaba a tope pero, cuando acababa, desconectaba y tenía más tiempo libre para estar con mi familia y amigos. Ahora, me cuesta mucho desconectar. No estoy picando piedra, ni antes tampoco, pero sí es muy duro a nivel mental. Y eso que trabajar como física también lo es y he pasado malas épocas durante mi docencia. Pero sí que noto que aquí me quemo mucho más y no llego a desconectar nunca. Cuando creas contenido para tantas plataformas tienes que ser original, pensar bien las ideas y darles forma… Echo de menos esa paz mental que tenía antes.
Es que no se habla mucho del estrés del streamer.
Estar expuesto a tanta gente y ser una persona pública te repercute en el estrés, estás siempre muy activo mentalmente. Es algo que igual la gente no entiende. Llevó más de tres años con mi pareja y me hice personaje público y creadora de contenido hace un año pero, al principio, cuando estaba con él no lo entendía.
Lo mejor y lo peor de convivir y relacionarte con otros creadores de contenido?
Lo mejor es que soy una persona muy extrovertida, entonces es bonito conocer a gente que se dedica a lo mismo que tú. Ellos entienden por lo que pasas y encuentras ese apoyo o motivación. La única parte mala es que tampoco desconectan nunca y te arrastran. Me da la sensación de que cuando estoy con ellos no es ocio, estamos creando contenido.
¿Crees que es sano rodearte en mayor medida de gente que está vinculada solo a este mundo?
No. Creo que es sano mantener a la gente con la que has crecido y ha estado ahí durante toda tu vida. Hay que buscar el equilibrio y se puede encontrar. El error es perder relación con la que gente que ha estado siempre. A día de hoy, la gente que ha estado siempre sigue estando. Todos mis amigos y familiares se han adaptado súper bien a esta nueva etapa mía. Diría que tengo un 65-70% de gente de toda la vida y un 30% de gente nueva que ha entrado en mi vida.
¿Cómo se vive con una pareja que, hoy en día, trabaja en lo mismo que tú?
Mucha gente puede pensar que dedicarnos a lo mismo ha sido negativo para relación pero todo lo contrario. Dedicarme a a ello me ha permitido entender muchas cosas que antes no entendía. De hecho, antes se lo echaba en cara. Le decía: “Ay, por un directo no pasa nada”. Sí pasa. Para la relación ha sido algo positivo el formar parte de lo mismo, también pasamos más tiempo juntos. Antes, estudiaba y trabajaba en Valencia y estaba todos los fines de semana para arriba y para abajo. Al final, era un sacrificio y muchas horas de coche, que también es un peligro. Mi padre me decía: “¡Vas a acabar matándote en la carretera!”. El pobre hombre tenía razón. Hacía muchos kilómetros. Era algo inviable. Al final, decidimos probar a ver si me gustaba y me sentía bien. Ha ido bien y estoy súper feliz. La carrera y los estudios los tengo. Si en algún momento quiero retomar en lo que me quedé o esto ya deja llenarme o de irme bien, tengo ese as bajo la manga. Él –TheGrefg, David Cánovas Martínez– me ha apoyado desde el principio.
¿Hay muchas opciones de conseguir dinero fácil trabajando en redes sociales?
Yo, desde luego, fácil no. Cada vez que una marca quiere trabajar conmigo intento ser original y currármelo mucho. Habrá gente que haya ganado dinero fácil en redes socialesmpero no es mi caso. También es muy satisfactorio cuando una marca te dice que están muy contentos con cómo trabajas y cómo ha ido la campaña. Da mucha satisfacción. Es verdad que se mueve mucho dinero pero te lo tienes que ganar.
¿Prefieres el anonimato?
Por una parte sí pero por otra no. Si me tuviera que decantar, me decantaría por el sí pero por el hecho de que la gente opina de lo que haces o dejas de hacer en tu vida personal. Tú enseñas una cosa pero la gente no sabe lo que hay detrás. Estar expuesto a tantas críticas y comentarios es algo que a veces pesa.
TEST RANDOM
¿Cuál es tu lado de la cama para dormir?
El derecho, siempre.
¿El último WhatsApp que has escrito?
Creo que ha sido a mi amiga Laura –Escanes–.
¿Cuánto dinero llevas encima?
Nunca llevo efectivo, siempre pago con tarjeta.
¿Comida a domicilio o en restaurante?
Restaurante.
¿La última vez que dijiste ‘te quiero’?
Esta mañana.
¿Tienes algún toc?
Sí. Cuando me voy a dormir tengo que mover los pies de lado a lado. Si no, no me puedo dormir. Como que me relaja. Mi pareja está harta.
¿Cuál es tu habilidad oculta?
Tengo una habilidad muy potente que es ser lady bug, todo lo malo que puede salir con la tecnología me pasa y toda mi comunidad puede verificarlo –ríe–.
¿Qué podemos ver en el fondo de pantalla de tu móvil?
A mi perrita Maya.
¿Tu vocación frustrada?
Piloto de aviones.
¿Cuál es la comida que mejor preparas?
Los huevos fritos es lo que más me gusta y lo que mejor se me da. Y los macarrones.
¿Tu último unfollow?
Sigo a mucha gente, no es propio de mí quitar follows.
¿Lo que más pereza te da en el mundo?
Madrugar. Lo odio.
¿Cuál sería tu superpoder?
Viajar en el tiempo.
¿Qué serías si no fueras streamer?
Física.
¿En qué época te hubiera gustado vivir?
Me gusta esta época aunque me gustaría viajar para ver algunos momentos históricos.
¿Tu primer recuerdo como famosa?
Uf, esa palabra se me hace rara… Pues mi primer directo, que fue surrealista.