De riguroso negro como siempre y con un rictus inescrutable, Domingo Rodríguez (Alicante, 1994) se presenta como un digno sucesor de Karl Lagerfeld. Enigmático y parco en palabras, el joven detrás de la firma e moda Dominnico mide tan bien todo lo que sale de su boca como cada uno de sus diseños. Pese a todo, conseguimos que nos abra las puertas de su atelier, ubicado en Barcelona, para intentar conocer un poco más al joven responsable de la marca que ha conquistado a las divas del panorama musical actual en apenas cuatro años.
Retrofuturismo de hoy
En el imaginario creativo de este alicantino de 25 años conviven actrices como Ava Gardner, Penélope Cruz o Rossy de Palma, el arte del pintor Pablo Picasso o el particular universo del director Pedro Almodóvar. Pero también reconoce sus influencias del mundo de las pasarelas. “Tengo diseñadores a los que admiro como John Galliano, Giambattista Valli, Thierry Mügler, Alexander McQueen, Maison Margiela o Watanabe”, confiesa. Unos iconos que le han ayudado a definir un estilo propio que mezcla lo futurista con lo vintage y el slow fashion.
Parte de los distintivos de su marca pasan por usar diferentes técnicas en una sola pieza y apostar por los tejidos metalizados y los holográficos. “La moda es una herramienta de comunicación y protesta de las sociedades desde hace siglos. Transgredir en moda es, sin duda, una forma de destacar o de hacerse ver”, recalca. Y si algo tiene claro él es que quiere llegar a ojos de todos. “No sé si me reconocen por la calle, quizás sí en los ambientes de moda, como es natural. Si mi rostro fuera tan reconocido como el de Donatella Versace, por ejemplo, querría decir que he triunfado en el mundo de la moda, y eso me gustaría”, asegura.
Una firma desde cero
Que emprender es sumamente complicado no es nada nuevo, igual que tampoco lo es que el universo de la moda sea un escenario muy restringido para los nuevos talentos. Pero el alma mater de Dominnico tenía claro que iba a formar parte de este mundo sí o sí y no dudó en fundar, en 2016, su firma de moda. “Para crear una marca hay que tener muchas ganas de trabajar en algo en lo que crees. El trabajo y la perseverancia de todo mi equipo ha sido la clave para estar aquí y, por supuesto, utilizar las redes sociales de una forma adecuada”, afirma. Una constancia y esfuerzo que le hizo ganar la Mercedes-Benz Fashion Talent de 2019 con su colección Harajuku Kids y alzarse como uno de los diseñadores jóvenes más aclamados de nuestro país.
También arrasó con una de sus últimas colecciones, Idolatría, presentada en la Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid en enero de 2020. Allí demostró de lo que era capaz al reinventar algo tan característico del folclore español como un mantón de manila bajo un prisma totalmente nuevo. Gracias a todos estos logros, Dominnico ya puede vivir de su firma y su nombre resuena en todos los círculos de la moda. “Dominnico es el alter ego de mi nombre. Cuando decidí llamar así a mi marca, busqué un nombre que sonara internacional y que pudiera dar a lugar a un concepto, a una comunidad. La tipografía habla de la simplicidad y el lujo”, comenta.
Las celebrities son la clave
A nivel mediático, Dominnico acaparó la atención del público después de vestir a grandes divas de la canción como Rosalía, Lady Gaga o Rita Ora. Todas ellas conocieron su trabajo a través de Instagram y se enamoraron de él, algo de lo que es totalmente consciente y por lo se siente muy agradecido. “El hecho de haber llegado a donde he llegado es gracias a un cúmulo de circunstancias y Rosalía, por supuesto, ha sido una de las grandes embajadoras de mi marca. Que estas celebridades se conviertan en clientas y confíen en mi marca, una y otra vez, siempre es rentable y no solo económicamente, sino a nivel publicidad”, apunta.
A Rosalía sí que la ha tratado en persona en varias ocasiones, pero con Lady Gaga no ha tenido esa suerte. “No la conozco personalmente. Mi contacto con ella es a través de su equipo de estilistas. En el caso de Rosalía sí que he tenido la posibilidad de trabajar mano a mano con ella y ha sido muy gratificante siempre”, indica. Un hall of fame que se completa con nombres como Doja Cat, Aitana o Rita Ora.
La moda en tiempos de Instagram
Dominnico, como buen hijo de su tiempo, ha sabido exprimir al máximo las posibilidades que ofrecen las redes sociales y darse a conocer entre los millennials a través de Instagram. Aunque prefiere no dar detalles sobre la relación con sus clientes más VIPS, sí que admite que fueron ellas las que le hablaron. “No es que no me apetezca hablar de ellas, sino que les tengo mucho respeto. En ambos casos, me contactaron a través de Instagram y comenzamos a trabajar, eso es todo”, explica tajante. Así trabajó con los estilistas de Lady Gaga para el Festival Internacional de Coachella y luego para el Tour de Barcelona en enero de 2018, mientras que a Rosalía la vistió en 2019 para su actuación en el Primavera Sound.
“Las redes sociales son muy importantes pero cuando hay algo detrás, es decir, cuando hay un trabajo como una Fashion Week, una campaña, el apoyo de las celebrities y, por supuesto, un equipo de comunicación”, desvela. Eso sí, el alicantino afirma no entregarse demasiado al postureo y prefiere usar las redes solo como herramienta de trabajo o para darse a conocer. Tampoco se deja influir por los haters. “He recibido críticas ya que lo que hago no tiene por qué gustar a todo el mundo, pero eso no hace que, poniendo en balanza la parte negativa y la positiva de las redes, me dejen de interesar”, comenta.
Crisis y alta costura
Sobre el futuro de la moda post-pandemia, Dominnico se muestra optimista. “Creo que la gente quiere seguir soñando y vistiendo con moda de autor”, celebra. Y en tiempos de crisis es inevitable poner el foco en los precios. El gasto medio anual de un español en moda es de 565,7 euros per cápita y lo más barato que encontramos en el catálogo de Dominnico es una mascarilla en tejido holográfico por 30 euros. “El margen de beneficio que tengo en cada una de las piezas que realizo no es muy alto porque las producciones son pequeñas. El alto precio de las piezas de alta costura se debe a muchos factores. Por supuesto a la marca, pero también a los tejidos y a las horas de trabajo que lleva hacer este tipo de piezas realizadas a mano. Es un cúmulo de factores”, defiende.
El atelier en casa
En más de una ocasión Dominnico ha señalado lo mucho que le cuesta mantener una firma de moda y que ha llegado a gastarse 2.000 euros en tejidos para una colección sin poder llegar a fin de mes. Pero eso no le ha detenido en su empeño por sacar su marca adelante, por ejemplo, instalando su taller en su propia casa de Barcelona, aunque cuenta con un espacio propio en Madrid. En este taller donde nos recibe atesora auténticas joyas. A saber, la gabardina morada de PVC transparente con aplicación de lentejuelas irisadas y cuello de pelo que vistió Doja Cat en el videoclip de Juicy o el top verde metalizado que lució Lady Gaga en la presentación de la película ‘Ha nacido una estrella’.
Pero tener el taller en casa hace que, a veces, sea complicado separar la vida laboral de la personal. El equipo interno de patronaje, confección, fitting model y comunicación está formado por siete personas, incluyéndole a él, que lleva la dirección creativa. “Trabajamos mucho. Hay veces que no sabemos en qué día vivimos, sobre todo cuando tenemos encargos. En época de Fashion Week trabajo diariamente entre 12 y 15 horas. No soy maniático, pero sí minucioso y bastante estricto a la hora de trabajar. El trabajo ocupa el mayor tiempo de mi vida y tengo poco tiempo para salir de fiesta”, asegura.
Moda sostenible
Otro de los grandes retos que asume la industria textil es la sostenibilidad. Según la ONU, la industria de la moda es responsable del 20% del desperdicio total de agua a nivel global y es la segunda más contaminante del planeta, produciendo más emisiones de carbono que todos los transportes marítimos y aéreos juntos. Por eso, Dominnico, pese a ser un enamorado de la peletería, ya no trabaja con pieles exóticas y solo usa pieles de animales destinados a la industria alimentaria. Además, ya apuesta por materiales reciclados. “En esta última colección hemos usado tanto materiales reciclados como el tafetán de la casa Gratacós como pieles recicladas de anteriores colecciones para darles una segunda vida”, explica. Está claro que Dominnico va por el bueno camino.
**Artículo originalmente publicado en el número 54 de Vis-à-Vis. Pide tu ejemplar en papel en tienda.ploimedia.com o descarga la edición digital interactiva para iOS o Android.