¿Quién no ha soñado alguna vez con vivir en una isla desierta? Un pensamiento recurrente cuando nos apetece escapar de todo que, ahora, puede hacerse realidad gracias a la curiosa oferta de trabajo de una isla irlandesa. Perteneciente al condado de Kerry, Gran Blasket es la más grande de un grupo de seis islas ubicadas en la costa atlántica, con unas dimensiones de 6×1,2 kilómetros. Este apartado rincón natural es el hogar habitual de una amplia diversidad de fauna y flora y uno de los iconos tradicionales del país, habiendo sido habitada durante siglos por una pequeña población que seguía las formas ancestrales de trabajo en la agricultura y la pesca.
Un paradisíaco rincón del mundo en el que ahora solo viven Billy O’Connor y su compañera Alice Hayes, propietarios de los únicos edificios que hay en el lugar: tres cabañas y una cafetería. El resto es terreno virgen, más de 400 hectáreas de terrero verde y en su mayoría montañoso que rebosa la esencia de la historia irlandesa. Sin embargo, parece que sus actuales habitantes no dan abasto. Por eso, la pareja va a anunciar en los próximos días dos vacantes como cuidador de la isla y abrirá un proceso de selección para candidatos de todo el mundo. La oferta incluye alojamiento, comida y un trabajo de seis meses a partir del 1 de abril de 2021. Eso sí, hay un hándicap: no hay electricidad ni agua caliente. Pero si esto tampoco te supone un problema, puedes enviar la solicitud aquí.
Sin gente pero con historia
Gran Blasket fue una vez el hogar de la reconocida autora y narradora Peig Sayers, cuyos escritos eran de lectura obligatoria en las escuelas irlandesas. No en vano, en un momento dado los habitantes de estas islas fueron objeto de estudios lingüísticos por su uso en gran parte inalterado de la lengua irlandesa. En su momento de mayor esplendor, la población de la isla alcanzó los 175 habitantes, pero fue finalmente desalojada en 1954 tras una fuerte disminución de la población y a las preocupaciones generadas por la gran dificultad de acceso en caso de emergencia.
Pero no es la primera vez que esta idílica isla busca empleados. El año pasado ya generó una gran repercusión internacional por una oferta similar para la que llegaron a recibir más de 40.000 solicitudes. Y una semana después del anuncio, más de 23.000 personas de sitios tan dispares como Finlandia, México o Argentina ya se habían postulado para el puesto. Hoy en día se puede acceder en barco y suele recibir la visita de turistas que quieren conocer uno de los rincones más remotos de la isla de Irlanda. Un paisaje verde que cuenta con impresionantes acantilados, playas de arena blanca, ruinas antiguas y mucha vida silvestre (que no humana). Para cumplir a rajatabla el distanciamiento social en un entorno de lujo. ¿Quién se apunta?