Como hemos podido comprobar a lo largo de esta cuarentena, el teletrabajo tiene sus pros y sus contras, tanto para los empleados como para las empresas. Pero, si hablamos exclusivamente en términos de comodidad, todos coincidiremos en que ganan las ventajas: te ahorras el tiempo y los gastos de desplazamiento, madrugas mucho menos, tardas segundos en llegar a tu puesto (casero) de trabajo y, por supuesto, te permite vestirte como te dé la real gana durante tu jornada laboral. Eso significa poder dejarse el pijama puesto todo el día o, en el mejor de los casos, quitártelo para enfundarte un mavarilloso chándal. Porque por mucho que nos hayan repetido que no debíamos caer en la dejadez o que, incluso, era recomendable vestirse como si fuéramos a la oficina, la comodidad ha acabado ganando la batalla.
Pero, ¿qué ocurre cuando hay que dar la cara en viodeoconferencias de trabajo? Sí, esas en las que no vale con desactivar la webcam para evitar que imágenes indeseadas se queden grabadas en tu retina. A veces en el teletrabajo es imprescindible dar la cara y mostrar la mejor versión de uno mismo, por lo que conviene estar prevenidos. Una opción es arreglarse como si Dios manda desde un principio, otra cambiarse de ropa deprisa y corriendo y, la última, hacer un apaño para dar el pego. Para los que se decantan más por esta tercera opción, el estudio creativo japonés Whatever inc. tiene una idea muy original. Se trata de una prenda que por la parte inferior es un pijama y por la zona del pecho una camisa, con sus botones, bolsillos y cuello.
Sus FHW Jammies (Work From Home) están pensados para los trabajadores remotos con un diseño de estilo formal solo visible para la zona hasta donde suele llegar el ángulo de la webcam. Un pequeño truco para mantener esos estándares estéticos que exige cualquier reunión de trabajo telemática. Como dicen desde su página web, “mitad negocios, mitad relajación”. Estos pijamas-camisa hechos a mano solo están disponibles en tres colores y son unisex, por lo que tampoco tienes que calentarte mucho la cabeza a la hora de elegir. Para el desarrollo de los modelos, Whatever Inc. ha contado con la participación de Akihiko Kimura, el diseñador que está detrás de la marca de moda LOKITHO.
Para conseguir financiación para el proyecto se realizó una campaña de crowdfunding desde la página de Kickstarter que terminó el pasado mes de mayo, por lo que actualmente se están preparando para su venta. En principio, la prenda se podrá empezar a comprar este mismo mes de junio, aunque todo depende de cuándo se vayan levantando las restricciones en la aceptación de paquetes de cada país. Una idea a tener muy en cuenta si esto del teletrabajo se alarga. Eso sí, nada de levantarte de la silla en toda la reunión si no quieres que se descubra el pastel.