A pesar de la buenas críticas y los premios, todavía hay mucha gente que no la tiene en su radar seriéfilo. ‘Succession’ nos sumerge en el seno de una de las familias más ricas y poderosas del planeta: los Roy. Para aquellos que aún no se han enganchado a los tejemanejes de este singular clan, aquí van unos cuantos motivos para que decidas si se puede convertir en tu nueva serie favorita de esta cuarentena (sin spoilers).
Los créditos iniciales y la canción
Es el primer contacto que vas a tener con la familia Roy y no puede ser más brillante. El opening nos muestra imágenes caseras del pasado de la familia grabadas en Super 8. Una secuencia obra del estudio de diseño Picturemill que está claramente inspirada en el inicio de la película ‘The Game’ de David Fincher. Y luego está esa melodía tan pegadiza que ya le valió un Emmy a su compositor, el pianista Nicolas Brithel. así que no se te ocurra saltarte la intro.
Unos personajes de 10
Podríamos dedicarle un artículo entero a cada uno de los miembros de la familia, pero el mejor resumen es que todos son maravillosos. Y los actores, por supuesto, están a la altura: Brian Cox en el papel del todopoderoso patriarca Roy Logan, Jeremy Strong como el heredero natural, Kendall Roy, Kieran Culkin que hace de Roman Roy, el hermano irresponsable, Sarah Snook es la pequeña del clan, Siobhan Roy, y Alan Ruck es el primogénito, Connor Roy. Sus personajes están tan bien armados que, por muy despreciables que te resulten por momentos, logras empatizar con ellos. Lo de amarlos ya es otra historia.
El dramón familiar
Sí, hay mucho y muy gordo, pero no te esperes muchas más lágrimas de las le ves derramar a Kendall en este gif. Porque los Roy pueden soltarse toda clase de improperios, desearse la muerte o pelearse hasta llegar a las manos, pero no ponerse sensibles. De culebrón solo tiene los celos y la traición. Si te ha tocado pasar la cuarentena con la familia y cada día la cosa está más tensa, ver ‘Succession’ te servirá de consuelo.
Arrasó en los pasados Globos de Oro
Junto a ‘Fleabag’ (BBC y Amazon Prime Video), ‘Succession’ fue la otra gran vencedora de los Globos de Oro 2020. La serie se hizo con el premio gordo, el de Mejor serie dramática de televisión, imponiéndose a ficciones de peso como ‘Big Little Lies’ o ‘The Crown’. Una gala en la que también se reconoció el impecable trabajo de Brian Cox, que se fue a casa con la estatuilla a Mejor actor de serie dramática. Y, como la ficción ha sido renovada por una tercera temporada, seguro que no serán los últimos premios que se lleve.
Los líos empresariales y políticos
La serie creada por Jesse Armstrong también nos permite imaginar cómo se las gastan en los grandes conglomerados empresariales. En este caso lo consiguen a través de Waystar Royco, una compañía billonaria que abarca medios de comunicación, cruceros, resorts y parques de atracciones. Y no, no hace falta que sepas cómo funciona la bolsa para entender la dinámica de una empresa de tales dimensiones. ¿Lo mejor? Esas juntas de accionistas en las que se decide el rumbo de todo un país.
Nos enseña la vida de los súper ricos
Y cuando decimos súper ricos hablamos de gente que pide prestado 100 millones de dólares como aquel que te pregunta si llevas algo suelto. Ese 1% de la población que ha perdido la cuenta de las mansiones de lujo que posee, que va a los sitios en helicóptero, que pasa los fines de semana en un yate de seis pisos y que acude a fiestas de postín día sí y día también. La exhibición de riqueza y el despilfarro resulta hasta insultante, pero no puedes dejar de mirar.
Los giros inesperados
Por norma general, los personajes de ‘Succession’ empiezan los episodios muy arriba y los acaban hundidos en la miseria –metafóricamente hablando, claro–. El espectador nunca sabe por dónde van a ir los tiros ni cómo van a reaccionar los personajes ante determinadas situaciones, y eso es lo que te mantiene en vilo constantemente. Si de algo entienden los Roy, además de negocios, es de cómo dar buenas puñaladas. Al lado de ellos, ‘Juego de Tronos’ es cosa de niños.
El humor negro
Pero elevado a la máxima potencia. Mención especial para los comentarios y chistes ácidos de Roman Roy. El tercero de los vástagos de Logan es ingenioso, rápido y, sobre todo, no tiene filtros. Lo mismo bromea con el incesto que con la forma fálica de las frutas, aunque delante de su padre siempre se corta un poco –por aquello de la millonaria herencia–. Otro que también deja momentos hilarantes es Tom Wamsgans, el marido de Siobhan, aunque en su caso por lo patético de su personaje. No te aseguramos carcajadas, pero sí grandes momentos de vergüenza ajena.
Los tacos
Sí, al parecer las personas más poderosas del mundo dicen palabrotas todo el rato. Te advertimos de que en ‘Succession’ casi todos los diálogos, ya sean de buen o mal rollo, terminan como un “fuck off“ –que en español se podría traducir como: “que te jodan”. Aquí te dejamos una recopilación que puede dañar tu sensibilidad auditiva.