Las Loubishark de Christian Louboutin ya son una de las sneakers más deseadas del momento, aunque puede que también le pongan los pelos de punta a más de uno. La famosa casa francesa le ha dado una vuelta de tuerca a su icónica suela roja para conseguir un estilo mucho más deportivo pero igual de reconocible. El resultado son unas zapatillas que siguen manteniendo el característico color rojo que lo define desde su fundación en 1991, pero incorporado en a una suela de neopreno XXL que simula la dentadura de un tiburón. Así, estas originales zapatillas siguen la aclamada estela de las ugly sneakers pero con una propuesta mucho más elegante que mantiene la esencia de la firma de stilettos.
Es evidente que más de 25 años haciendo calzado dejan un savoir faire innegable que podemos ver en todos los modelos de esta nueva línea tan peculiar. En total son 12 modelos, todos ellos con cuidadísimos detalles y una combinación de texturas y colores de lo más llamativa. La parte superior de la deportiva combina hasta 13 componentes diferentes que definen una arquitectónica estructura a base de paneles de cuero, gamuza, goma y una malla y jaula de celosía en el talón que recuerda a las redes de pesca.
Con un diseño tan freak y original no es raro que las redes sociales se hayan obsesionado con estas nuevas sneakers. Pero no solo han triunfado por su diseño rompedor y el trabajo artesanal que tienen detrás —se invirtieron 67 horas para crear una freidora especial para esculpir el molde se su original suela— sino que además son muy cómodas. El sistema construcción Strobel favorece la amortiguación y la comodidad, mientras que el Tubular Bologna en el talón logra una mayor flexibilidad.
Un diseño con el que también se pone el foco en el drama de una especie el peligro de extinción. y es que lejos de lo que nos muestra el cine, los tiburones tienen mucho más que temer al ser humano y no a la inversa. Por ello, estas zapatillas buscan concienciar sobre el peligro que corren los escualos. Según Greenpeace, un total de 17 especies de tiburones se encuentran en peligro de extinción y la ausencia de protección en las aguas internacionales se traduce en la muerte de 100 millones de tiburones cada año. Una tragedia que la flota pesquera española aviva ya que es la mayor captora de tiburones dentro de la Unión Europea. Un hecho que nunca está de más recordar para tomar conciencia, aunque sea a través de la moda.