Si acertar con los regalos tradicionales ya es complicado, hacerlo con los regalos-experiencia lo es aún más. Pero cuando esa experiencia está diseñada a gusto del huésped, el margen de error se reduce. Y para viaje a medida el que te puedes pegar en este espectacular resort del grupo Barceló abierto en 2018.
Ubicado en plena costa Adeje, al sur de Tenerife –una de las zonas menos explotadas de la isla–, el complejo abarca más de 10.000 metros cuadrados y se compone de dos edificios: el Royal Hideaway Corales Suites, un formato family friendly con 114 Deluxe Suites, Villas Suite y Penthouse, y el Royal Hideaway Corales Beach, un concepto adults only con estancias de 55 metros cuadrados y terrazas de 20 con vistas al océano y a la cercana isla de La Gomera.
Diseñado por Leonardo Omar, uno de los arquitectos canarios con mayor proyección internacional, se caracteriza por su arquitectura vanguardista en la que abunda la geometría de líneas sobrias, pero dando a la naturaleza el espacio que se merece, que es mucho. Un diseño que le ha valido varios premios, como el de Mejor Hotel de Nueva Edificación en los European Hospitality Awards, en 2018, o al Mejor Resort y Hotel Villa de Lujo 2019 de los World Travel Awards, algo así como los Oscar del turismo.
La temperatura media de la isla en diciembre es de unos 20 grados.
Y no es para menos. La estructura exterior emula la forma de un barco anclado en la costa, mientras que en sus interiores adopta formas representativas de los fondos marinos, como las formas fractales de los corales. Aunque, sin duda, lo más novedoso de este hotel es la forma en la que se conecta directamente con el paisaje. De hecho, una de sus recepciones ha sido transformada en una espectacular cueva con paredes de roca natural que se se desarrolla entre pequeñas lagunas interiores. De esta forma, se simula una auténtica cavidad submarina en la que se combinan a la perfección los elementos vanguardistas en el mobiliario.
Aprovechando esta peculiaridad, en una de las paredes de la recepción principal, se ha instalado un video mapping que nos muestra animaciones del fondo marino o de ríos de lava. La pared, de origen volcánico y de unos 10 metros de anchura y casi 6 de alto, fue escaneada con láser para su posterior modelado en 3D, lo que consigue dotar de vida un elemento inerte como es la roca.
Y esto solo es el principio. La oferta de la experiencia a medida va desde un crucero para ver las estrellas junto a un sky coach o un recorrido en helicóptero de casi una hora para explorar la isla de norte a sur; a un tratamiento en la terraza de una de sus suites acompañado de una sesión de mindfulness o un traslado en barco privado para observar acantilados volcánicos de más de 1.000 metros de altura.
Después de todo eso, seguro que te entra hambre. El Royal Hideaway Corales Suites también tiene la mejor propuesta: Maresía by hermanos Padrón (con estrella Michelin), el restaurante de cocina nikkei San Hô (en la imagen), Starfish The Grill y Il Bocconcino di Olivia. Además, quien lo desee puede llevarse el restaurante a la suite con la opción Chef in Room. Una experiencia a pedir de boca para regalar o, mejor aún, para que te regalen.
