Seguro que a estas alturas del confinamiento ya has realizado todos los challenges de TikTok posibles, hablado por videollamada hasta con tus primos del pueblo e innovado en la cocina más que Ferran Adrià. Por eso, ya va siendo hora de que te pongas las pilas con una de las típicas asignaturas pendientes: los idiomas. Te decimos cómo puedes hacerlo.
Aprende jugando
Duolingo es una de esas apps que no debe faltar en tu teléfono móvil. Se puede usar de forma totalmente gratuita –exceptuando su paquete premium–, cuenta con más de 300 millones de usuarios en todo el mundo y permite la opción de aprender hasta 30 idiomas diferentes a golpe de slide. Su principal secreto está en su interfaz, similar a cualquier juego de móvil. Sí, de esos a los que te enganchas para pasar las horas muertas. Además, su metodología basada en la repetición de conceptos, hace que los usuarios para aprobar deban superar niveles y competir entre sí. Cuanto más hinques los codos o, mejor dicho, los pulgares, más puestos ascenderás en el ranking global.
Bla, bla, bla
Una de las cosas que más se nos resiste cuando intentamos aprender un idioma es la conversación. Sin embargo, que salgas de la cuarenta con un par de idiomas más en el currículum está en tu mano. Gracias a la aplicación Babbel tus recursos a la hora de entablar una charla mejorarán considerablemente. Su metodología se centra en diálogos interactivos reales desde el primer día, con profesores que imparten el contenido de sus cursos o con otros alumnos de la plataforma. Además, las conversaciones estarán enfocadas según tus gustos o necesidades, desde fútbol o moda a cosas del trabajo.
Ejercita tu memoria
Si tu problema es el vocabulario, una de las herramientas más eficaces es AnkiWeb. Su sistema, totalmente gratuito, se basa en la repetición y en la teoría de que cuantas más veces digas una palabra, antes la memorizarás. Es algo así como volver a las tablas de multiplicar pero en software. Su funcionamiento se basa en tarjetas de información –que podremos importar desde nuestro ordenador o móvil–, en este caso, palabras del idioma que queramos aprender. Durante el estudio, el sistema irá reproduciendo las flashcard y nosotros tendremos que ir traduciendo su significado en el menor tiempo posible como si fuera una prueba. Una vez finalizado, la app registrará nuestros aciertos y fallos para preguntarnos de nuevo aquellas tarjetas donde más fallamos o más tiempo tardamos en responder.
Márcate un objetivo
Fijarse pequeñas metas es una de las formas más recomendables de encarar el aprendizaje de un idioma. En ese sentido, la app Bussu te permite personalizar tu estudio en función de tu tiempo y objetivos. Pasos pequeños pero seguros. Además de la gramática y el vocabulario, uno de los fuertes de esta plataforma es que cuenta con hablantes nativos que ayudan a mejorar la pronunciación. Una forma de tener amigos de todo el mundo sin salir de casa, ya que la aplicación permite el aprendizaje de hasta doce idiomas diferentes. Eso sí, tras superar el periodo de prueba tendrás que decantarte por la versión premium o premium plus.
Aprende en realidad aumentada
Mondly aprovecha todos los recursos de la tecnología para que la experiencia de estudiar un idioma sea divertida. Aparte de contar con 41 idiomas y más de 300 lecciones, la plataforma dispone de un sistema de realidad aumentada con el que mejorar el vocabulario. Accediendo a la versión premium de la app encontramos Mondly AR, un sistema que, utilizando la cámara del móvil, traduce al idioma que seleccionemos todo lo que enfoquemos. Si creías que los filtros de Instagram eran lo más, espérate a probar esta forma de estudiar.