8 planes para gozártela al máximo en el Día del Soltero (y la soltera)

Además de para pillar descuentos, puedes aprovechar este 11 del 11 para dedicarte el día a ti y disfrutar del placer de estar solo/a.

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Ya dijo Lunay aquello de “estar soltera está de moda”, y lo cierto es que el cantante puertorriqueño no iba desencaminado. Cada vez son más quienes prefieren no tener pareja seria o apostar por otro tipo de relaciones menos convencionales. De hecho, el porcentaje de solteros en España aumentó a un 36% en 2020, lo que supone unos 15 millones de personas, y todo parece indicar que la tendencia irá en alza. Y para celebrar este orgullo single, en China comenzaron en 1993 a celebrar cada 11 de noviembre el Día del Soltero. Con los años, y en parte gracias a todas las ofertas que estos días lanzan portales como AliExpress, la celebración se ha internacionalizado. Así que si tú también quieres celebrar tu soltería, aquí tienes unos planazos en los que sobra todo el mundo menos tú.

No compartas palomitas

¿Ir al cine solo/a? Por supuesto. Aunque muchos todavía se mueran de vergüenza con solo pensar en pedir entrada para uno, lo cierto es que disfrutar de una película a solas es una experiencia muy entretenida. Al fin y al cabo, ¿vas a ver una peli o a mantener una charla? Si no sabes qué película ver, ‘Eternals‘, la nuevo de Marvel, está repleta de acción y buenas dosis de adrenalina. Eso sí, aunque vayas forever alone no tienes porque dejar de pedir las palomitas grandes.

Date un baño de bosque

Si todavía no sabes qué es eso de un baño de bosque, estás muy out en cuanto a tendencias para lograr desconectar del estrés cotidiano.  Los baños de bosque o Shinrin Yoku ya son una práctica común en Japón que, poco a poco, se ha ido extendiendo por sus beneficios a nivel físico y mental. Entre ellos, cabe mencionar el descenso de la hormona cortisol de hasta un 12,4 %, así como de la presión sanguínea. Básicamente, este plan consiste en dar paseos por el bosque para impregnarte de la atmósfera del mismo, por lo que debes interaccionar con el espacio jugando con tus cinco sentidos. Ahora, con la caía de la hoja, bosques como el hayedo de La Pedrosa en Segovia o el castañar de El Tiemblo en Ávila son auténticos enclaves de cuento.

Regálate un orgasmo

Nadie te conoce mejor que tú mismo/a, sobre todo en el sexo. Los tuppersex, esos talleres para aprender de sexualidad y conocer qué juguetes y productos eróticos se adaptan mejor a tus preferencias, son una actividad divertida e ideal para ir tanto a solas o con amigos. En Barcelona, la psicóloga y sexóloga Montse Iserte organiza reuniones amenas y muy educativas con las que redescubrirás tu sexualidad. Además, cuenta con un equipo de sexólogas que se distribuyen por distintas partes de España.

Entre masajes y burbujas

Después de la cuesta de septiembre y para afrontar las Navidades con energía suficiente, lo mejor es perderte unas horas (o días) en un spa donde olvidarte del ajetreo exterior. Ya sea sumergiéndote en un jacuzzi o regalándote algún reconfortante masaje, conseguirás salir con un reset completo. El spa Finca Cortesín de Casares, en Málaga, ofrece una carta de tratamientos orientales con los que conectar alma y cuerpo, mientras que Despacio Spa en Barcelona se decanta por una auténtica experiencia nórdica con su sauna finlandesa o su masaje exfoliante con piedras calientes.

Despacio Spa

¿Una escapada a solas? Claro que sí

Cada vez está más de moda eso de coger la maleta y marcharte a solas para descubrir mundo, aunque en nuestro país aún no es una costumbre muy extendida. No en vano, solo el 3% de los viajeros lo hacen solos, frente al 11% que marca la tendencia mundial. Sin embargo, en mujeres sí que se está extendiendo esta práctica y España ya es el tercer país del mundo con más mujeres que viajan solas. De hecho, según Kiwi.com, la empresa líder en tecnología de viajes online, en los últimos tres años cerca de 150.000 mujeres han viajado solas desde España. Y ahora que Estados Unidos acaba de abrir fronteras, puedes hacerlo a la que dicen que es la mejor ciudad para viajar solo: Nueva York.

F/ Jorge Fernández Salas

El look que siempre quisiste

Los que se definen como fashion victim saben de sobra que irse de tiendas solos siempre es mejor. Sin prisas y a tu aire, puedes descubrir los mejores conjuntos y gangas. Eso sí, si puedes ir con alguien que entienda del tema, mucho mejor. Es ahí donde entra en juego la asesoría de un personal shopper, profesionales de la moda que te asesoran para ayudarte a renovar tu imagen y saber qué estilos son los que más te favorecen. En Madrid, la diseñadora Ana Iriberri ofrece servicios de asesoría de imagen para que cambies tu fondo de armario.

Visita un museo (como nunca pensaste)

Los museos son lugares perfectos para disfrutar de la soledad. Y es que el arte se aprecia de manera especial cuando tienes tiempo para reflexionar y dejar volar tu imaginación. Pero si los museos tradicionales ya los tienes muy vistos, apuesta por una experiencia inmersiva como la que ofrece In Goya. Esta exposición, que estará en Madrid hasta el próximo mes de enero, combina imágenes en gran formato, movimiento y sonidos envolventes para que conozcas la obra del artista aragonés como nunca antes.

Mesa para uno

El acto de alimentarnos en compañía viene de los orígenes del ser humano, como una forma de crear vínculos sociales. Es por eso que cuando trasgedimos este código tan asentado nos sentimos extraños, marginados. Pero no tiene por qué ser así. Ir a comer o cenar a solas puede ser una manera diferente y más profunda de degustar de la gastronomía. Para ello, te recomendamos un par de sitios nuevos. El primero está en el madrileño barrio de Malasaña y se llama Beirutista, un local que convierte las recetas libanesas más sabrosas en sorprendentes rolls a la vez que fusiona vanguardia y tradición. Y el segundo, Llit del Túria, se encuentra en Valencia y se trata de un bar cultural que busca aunar la mejor gastronomía mediterránea con una amplia oferta de ocio, música y espacios culturales.

Interior del restaurante Beirutista

Interior del restaurante Beirutista